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La dermatitis seborreica es una de las enfermedades más comunes que podemos encontrar en nuestra piel.
Un mal cuidado, no seguir los consejos de nuestros médicos o llevar una vida que no destaque por saludable puede generar problemas en la dermis como esta enfermedad. Sigue leyendo
La dermatitis seborreica es un trastorno de la piel que se da con frecuencia y que afecta sobre todo al cuero cabelludo, pero también al rostro y al tronco. Sus características principales son una manchas escamosas, junto con caspa persistente y piel enrojecida. Lo habitual es que aparezca en las zonas que son especialmente oleosos, como las orejas, los lados de la nariz, las cejas, los párpados o el pecho. Se da principalmente en la primera infancia, durante la lactancia, y se llama costra de la leche, y luego a partir de los 40 años. Está causada por un hongo llamado Pityrosporum. En este artículo te damos algunos consejos para saber cómo evitar que la dermatitis seborreica se extienda al rostro.
En muchas ocasiones, el desconocimiento o el miedo pueden llevar a grandes confusiones y, por tanto, a no buenas decisiones. En este post vamos a hablar sobre la dermatitis seborreica, aclarando algunos conceptos y desmontando falsos mitos que se han ido construyendo alrededor de ella.
Vivimos en un mundo marcado por el estrés. Todo el mundo ha dicho alguna vez aquella frase “de casa al trabajo y del trabajo a casa”, algo que está siendo prácticamente una forma de vivir en esta sociedad estresada. La inmediatez, los nuevos trabajos, el emprender, las redes sociales, las noticias, la crisis económica… Apenas nada de lo que marca la agenda informativa del mundo actual puede ayudarnos para controlar nuestro estrés o incluso para relajarnos. Y, obviamente, el estrés también afecta a nuestra salud sobre todo cardiovascular pero esta vez va más allá y afecta a nuestra piel. Y es que el estrés se ha convertido en un aliado de la dermatitis seborreica. Sigue leyendo
Las cremas y jabones específicos son sin duda una forma muy eficaz de tratar los problemas de la piel, ya que están especialmente diseñados para tratar enfermedades cutáneas concretas con la cantidad de componentes adecuada para cada afección.
La dermatitis seborreica es una alteración de la piel crónica que inflama zonas de la piel con glándulas sebáceas sobre todo en el cuero cabelludo, algunas zonas de la cara (párpados, nariz), detrás de las orejas y en el tórax.
En ocasiones también tiene inflamaciones en los pliegues de brazos, piernas e ingles. Suelen verse más afectados hombres que mujeres y no es una enfermedad contagiosa, algo que mucha gente cree por puro desconocimiento.
La causa de la dermatitis seborreica es desconocida y se manifiesta a partir de una excesiva renovación celular que provoca la formación de placas de distinto tamaño.
La dermatitis seborreica es una afección de la piel crónica que cursa con inflamación de ciertas zonas del cuero cabelludo, rostro, pliegues y parte alta del tórax. Suele afectar tanto a hombres como a mujeres y no es contagiosa.
La dermatitis seborreica es una alteración cutánea muy frecuente que se manifiesta a través de lesiones en la piel, de zonas muy grasas, descamaciones e inflamaciones tanto en el cuero cabelludo como en otras partes del cuerpo.
Se trata de una afección crónica que afecta tanto a hombres como a mujeres y suele surgir entre los treinta y los sesenta años. Si se sigue el tratamiento al pie de la letra se puede controlar hasta cierto punto, sobre todo si hacemos caso de lo que el médico nos indica.
Una de las indicaciones que muy probablemente nos dará el dermatólogo estará referida a la comida. Todo lo que ingerimos tiene su reflejo en la piel, tengamos dermatitis seborreica o no. Pero en el caso de tener algún problema en la piel, comer determinadas cosas o prescindir de otras puede tener sus efectos.
Conocemos de sobra las implicaciones de la dieta en el tratamiento de la dermatitis seborreica y por seguro que nosotros mismos hemos descubierto cómo ciertos alimentos nos afectan de forma muy concreta, haciendo que suframos más o menos brotes.
Uno de los alimentos que levantan más controversia son los lácteos. De unos años a esta parte, muchas universidades han hecho estudios que destacan que los seres humanos no digerimos bien la leche a partir de los tres años.
