Nuestra piel es el órgano más extenso del cuerpo y uno de los más sensibles, puesto que se puede ver afectado por las más múltiples circunstancias. Además, nos ayuda a mantener la temperatura corporal, nos protege de agentes externos y de microbios.
Es por ello que debemos cuidar al máximo la piel para que pueda cumplir su función. Si tenemos la debemos extremar las precauciones para su cuidado y conocer a la perfección cuáles son los factores que más pueden hacer empeorar su estado.